Es cierto, el PLD en el transcurso del gobierno se fue distanciando de los principios que dieron origen a esta organización política, pero también es cierto que el PLD se compone por todos y cada uno de los militantes y dirigentes que componen su matrícula, estructura que desde el gobierno ha encabezado la mayor etapa de reformas políticas, sociales, desarrollo económico de nuestra historia República.
Hoy tras perder el poder el PLD está herido fuertemente, la credibilidad pública de nuestro partido está en su peor momento, la capacidad competitiva se ve menguada, pero con plena convicción les digo que las heridas sanarán, la moral y orgullo morado retornarán a nuestros militantes y volveremos al poder.
Este IX congreso que recién inicia debe desarrollarse con transparencia, equidad, pluralidad y equidad, dando oportunidades a las nuevas generaciones de inyectar sangre nueva a los organismos de dirección de todos los niveles en sinergia con la dirigencia experimentada, sabiendo combinar lo mejor de ambos segmentos.
Arriba el PLD, que viva Juan Bosh
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